Cómo ahorrar en la calefacción eléctrica de tu negocio

ROIPRESS / ESPAÑA / EXPERTOS - El elevado precio de la luz ha generado una gran preocupación en las empresas, que buscan las mejores alternativas para reducir el consumo energético. Una de las principales dudas que surgen es cómo ahorrar en la calefacción eléctrica. Por este motivo, vamos a profundizar en este post en este asunto.

Partimos de la base de que el uso adecuado de los aparatos eléctricos puede ser determinante para este ahorro, sin embargo, hay otros factores a tener en cuenta. De hecho, las facturas de la electricidad son mucho más elevadas en los establecimientos comerciales, oficinas e industrias, por lo que cualquier alternativa es una buena opción para tener un mayor control del gasto.

En los meses más fríos del año, prácticamente es imposible estar sin un sistema de calefacción para acondicionar las instalaciones de un negocio. Como bien sabemos, la luz y la climatización son uno de los mayores gastos que soportan las empresas. Por este motivo, vamos a ofrecerte unos pequeños consejos para economizar dichos recursos.

Elegir el sistema de calefacción más eficiente

Si te preocupa cómo gastar menos en calefacción, el primer consejo es comprar un aparato que sea eficiente. En el mercado, hay disponibles un gran número de modelos y marcas, sin embargo, revisar la etiqueta energética es fundamental para conseguir un equipo que nos garantice las mejores prestaciones. Un radiador eléctrico de clase A permite un ahorro del 50% en muchos casos. 

Seleccionar la temperatura adecuada

Lo más normal, cuando llega el frío, es subir la temperatura para calentar las estancias. Esto no solo dispara el consumo de energía, sino que también ofrece pocos resultados. Lo más recomendable, es programar una temperatura que se encuentre entre los 20 °C a 22 °C para conseguir un ambiente laboral confortable y saludable. Además, se recomienda la correcta ventilación por un período de unos diez minutos para renovar el aire.

Correcto mantenimiento del aparato

Otro aspecto crucial y que debemos tener en cuenta es el mantenimiento de los equipos. Si llevan bastante tiempo sin encenderse, lo más conveniente es hacer una revisión para ver si están en buenas condiciones. Asimismo, podremos observar si los cables de alimentación están deteriorados, si hay alguna obstrucción o si los filtros están limpios. En caso de notar alguna anomalía, habría que avisar a un técnico.

Encender la calefacción si se necesita

Hoy en día, la mayoría de los radiadores eléctricos se pueden programar y esto es de gran ayuda para tener un mayor control. Es muy importante encender la calefacción solo cuando se necesita, por este motivo, si la empresa solo tiene horario diario, lo más recomendable es apagar la calefacción por la noche. Esos sí, hay que encenderla un poco antes de que lleguen los empleados.

Aislar las instalaciones para un mayor confort

Si además de elegir un sistema de calefacción que sea eficiente, nos preocupamos por aislar correctamente las instalaciones, habremos conseguido reducir el gasto energético en gran medida. Hoy en día, hay muchas soluciones y alternativas que sirven para minimizar las pérdidas de calor. Por ejemplo, en el caso de las ventanas se puede usar el sistema de doble cristal para evitar posibles filtraciones. Lo mismo sucede con las puertas y paredes con el fin de garantizar un mayor confort térmico.

Inspeccionar las instalaciones para evitar fugas

Asimismo, es muy importante hacer una revisión de forma periódica para ver si se producen fugas a través de las ventanas o puertas. Además, lo más conveniente es no encender la calefacción en los despachos, salas de reuniones o aquellas estancias en las que no haya nadie. Esto evitará un mayor consumo y un menor importe del recibo de la luz.

Establecer la potencia adecuada

Como bien sabemos, si bajamos la potencia eléctrica podremos reducir también el consumo de energía. En cualquier caso, hay que hacer un cálculo del número de kilovatios que necesita la empresa y saber si la potencia contratada da respuesta al número de aparatos conectados a la luz. Por lo tanto, si contratamos más de la que necesitamos, tendremos que hacer frente a un gasto 

En conclusión, esperamos que estos consejos te sean de gran ayuda si no sabes cómo ahorrar en la calefacción eléctrica de tu negocio. Sin embargo, lo más conveniente es dejarse asesorar por profesionales en este sector. Incluso, es muy acertado que antes de hacer la contratación del suministro, sea previamente supervisado por un experto.